Desde Estados Unidos han venido a presentar su nuevo LP llamado Femejism las garajeras de Deap Vally que saldrá a la venta el próximo 16 de septiembre.
Quién dijo que para hacer música hace falta bajo, batería y guitarra? Ya quedó demostrado con uno de los dúos más conocidos del Rock, The White Stripes, que no queridos lectores, día a día vamos descubriendo bandas que nos hacen romper nuestros esquemas a la hora de pensar en formar una banda, querer que ésta suene potente y que llegue a conquistar nuestros oídos.
A las chicas de California no les hace falta ni bajo, ni segunda guitarra. Lindsey y Julie se bastan solas para hacer rugir una sala abarrotada con su sonido y actitud femeninamente “I don´t give a shit”, ellas mismas se denominan como dos personas que hacen demasiado ruido, pues ese ruido nos ha entrado como heroína a un yonki, dejándome personalmente con ganas de seguir escuchándolas y tirarme desde el escenario sobre las cabezas danzantes. Si bien es cierto que desconocía la existencia de esta banda, que gracias a las buenas críticas de su primer disco Sistrionix me decidí a ver que tenían para ofrecerme y la verdad es que no me defraudaron.
Con canciones con riffs pegadizos y batería sólida, se ponían en marcha las feministas con el primer single de Sistrionix, “Gonna make my own money” que además del sonido garaje nos transportan a los años 60’s donde, si bien es cierto, la música era menos elaborada, el sonido era preciso, certero y directo a la vena. Con Lie y End of the World también del primer álbum los presentes nos vimos sumergidos y envueltos en ese “ruido” oscuro y estridente, como hipnotizados. Con la batería enérgica de Bad for my Body no sacan del letargo y nos hacen saltar y sudar para volver a meternos en el foso con Baby I call Hell, en esta última Lindsey a la voz y guitarra deja su instrumento para lanzarse sobre nuestras cabezas y volver al escenario donde Julie a la batería seguía marcando el ritmo.
Con la primera mitad del concierto casi completa las chicas nos presentan material del segundo álbum Femejism, Royal Jelly y Smile more, temas con cortes bluseros y quizá algo más oscuros pero siempre muy cañeras, nos devuelven a los 60´s con la tralla de Little Baby Beauty Queen y su estribillo pegadizo rompen el corto momento de calma al que nos habían llevado con los temas anteriores. Siguen con Bubble Baby, un tema que parece traído desde el más allá por el sonido algo carcelario de antaño, sonaba excelentemente añejo. Se despiden con Walk of Shame, también del primer álbum, para hacernos bailar por última vez. La voz de Lindsey le da ese toque aún más desaliñado que encaja perfectamente con la música.
Debo de reconocer que no soy muy fan de bandas donde predomine el género femenino, incluso siendo parte de ese género, pero esa noche volví a casa con una rara sensación en el cuerpo…hostia! Que me han gustado y además os las recomiendo en un 100%, seguro no os dejarán indiferentes.
Vuelven a Londres el viernes 16 de septiembre al Islington Assembly Hall.
Deap Vally, Boston Music Room, London, July 28th 2016